Campeche, un recorrido por su arquitectura colonial barroca y militar



A poco más de dos horas de camino en auto de la ciudad de Mérida, Campeche es uno de los destinos más entrañables del sur maya, en donde tradición, cultura y dinamismo engranan de forma fascinante con la vitalidad contemporánea que hoy encabeza Mérida. 


Dentro de toda las bondades y generosidades atractivas que ofrece la región, los paseos cortos partiendo de Mérida son algunas de las actividades de mayor arraigo y fortaleza, en donde la arquitectura dota a la zona de una personalidad incomparable, un aspecto y preservación envidiables, y un patrimonio excepcional de México, el cual es un imperdible que se debe vivir al menos una vez en la vida. 


Ciudad amurallada y de interminable herencia colonial, Campeche fue nombrada en 1999 como Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, siendo el punto estratégico de antiguos ataques piratas y el escenario ideal en donde los románticos escribían sus poemas al mar.


Además de su clima generoso y su arquitectura de primer orden, Campeche funde como pocas ciudades de la región la complejidad colonial, barroca y militar en su atractiva fascinación. 


Dentro de este maravilloso recorrido, un imperdible es pasar por la Puerta de Tierra, peculiar emplazamiento, en donde el atractivo principal lo roba un cañón de bronce de 3.5 metros de longitud y que data la fecha de su fundición 1732. Toda una reliquia. 


Todo esto y más nos ofrece nuestro recorrido breve por Campeche, en donde el azul prístino del mundo maya, icónico y persistente desde nuestra partida de mérida, empata de forma plena con sus impecables plazas, excelsa gastronomía y secretos culturales, los cuales nos son revelados a bordo de un tour local o a pie por nuestra cuenta, enamorándonos desde el primer minuto. 


Si quieres saber de dónde viene la fascinación mundial con la Ruta de los Baluartes, o porqué el mercado Pedro Saínz es el lugar definitivo para comer un pan de cazón o unos tamales de harina colada, tendrás que aprovechar la breve pero consistente belleza de visitar desde Mérida las bellezas y bondades campechanas. 


Ya sea si se va solo o acompañado, por una sola tarde o un fin de semana completo, Campeche siempre nos abrirá sus majestuosas puertas de tierra y de mar, que en otros tiempos fuera la entrada para el comercio con España con el nuevo territorio colonizado, recordándonos su riqueza histórica y humana.