Cuando estamos en busca de un nuevo hogar, son muchos los factores que entran en juego, y la mayoría de las veces estos pueden llegar a abrumar de forma recurrente, impidiendonos tomar una decisión correcta. Qué tanto está en nuestro poder de decisión y qué tanto es un escenario que se presentó para convertirlo en una oportunidad, depende de nuestra concentración, tiempo y sentido de la evaluación para poder equilibrar todas las variables que se deben tomar en cuenta.
Comprar un departamento o una casa es una decisión importante, ya que una mala decisión no tiene mucha vuelta atrás, y hay que estar convencidos al 200% que la acción que tomemos es y será la que se traducirá en una buena opción.
Sin embargo, muchas veces desconocemos el mercado a ciencia cierta y sólo nos dejamos guiar por el precio, el aspecto y la ubicación del desarrollo. Esta visión natural, pero inmediata, se suma a un estilo de vida que impera sobre la falta de tiempo, las letras pequeñas de los contratos, en la que muchas son similares pero que tienen sus diferencias, y en donde la necesidad de una visión experta se requiere sobremanera.
Por fortuna, esa figura externa existe en el mercado inmobiliario y nos puede impulsar a tomar la mejor decisión en conjunto con sus servicios y expertise. El asesor inmobiliario es el especialista que sabe a bien cuál será la mejor opción inmobiliaria, y que de alguna forma nos ayuda a ver el panorama completo.
La relación con un agente inmobiliario se basa en el conocimiento más completo de tus necesidades, intereses y capacidades financieras para adquirir una propiedad. Te ahorrará el tiempo y algunos trámites para ser más certeros en la búsqueda del hogar perfecto.
¿Buscas rentar la propiedad en un futuro o piensas vivir en ella?, ¿la heredarías en algún momento o considerarías venderla?, ¿por dónde quieres que esté ubicada?, ¿cerca del trabajo y en un lugar cómodo y apacible?, ¿o que esté conectado a comercios y centros de esparcimiento?, ¿todo a la vez? Esta y otras preguntas son el armado y la base que el agente inmobiliario irá incorporando a sus tareas para no sólo darte la mejor opción, sino para traerte los beneficios, ventajas y detalles que no siempre están a la vista.
Otros beneficios que conlleva contratar con un agente inmobiliario de alto valor, es que su trabajo pronto se tiene que traducir en un ahorro de tiempo notable para ti, así como acceso a información y ofertas exclusivas que a uno mismo por cuenta propia se le haría más tardado. Con un agente inmobiliario te aseguras de sólo tener las opciones seguras, legales y que más te convienen, además de que todo el papeleo y trámite legal corre por su cuenta.
Por otra parte, es muy importante que ubiques perfectamente que tu asesor inmobiliario es alguien de confianza, certificado y/o recomendado y que tenga un amplio sentido como gestor y negociador para darte el servicio que necesitas.
De cara encontrar la mejor opción inmobiliaria, tu asesor te ayudará siempre a que puedas ver, evaluar e incluso vivir las mejores alternativas, que habitualmente son las de mayor presencia y oferta de valor, pero que al final del día también te dejarán en completa libertad sobre la decisión final, sin ningún hueco por cubrir u opción por ser considerada.